12 cualidades de un buen líder [¿Cuántas tienes?]

Contar con un puesto de liderazgo dentro de una compañía es motivador, sin embargo, implica una exigencia y responsabilidad.

Un buen líder nunca puede dejar de aprender, debe capacitarse y mantenerse entrenado en sus aptitudes y estar siempre a la vanguardia de las últimas novedades técnicas y herramientas que le ayuden a desarrollarse exitosamente en su posición.

Te estarás preguntando, entonces, si un líder nace como tal o se hace. Realmente son muchas y variadas las fortalezas que debe tener y se le pueden requerir a un líder, sin embargo, la mayoría se entrenan y se mejoran con práctica y formación.

Te contaremos 12 cualidades que debería tener una persona que quiere coordinar y gestionar equipos de manera eficiente. Sin embargo, cada empresa podría destacar alguna por sobre otra, o agregar otras que sean apropiadas para su cultura organizacional.

Las 12 características principales de todo buen líder son:

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  1. Pasión e inspiración
  2. Habilidad para delegar
  3. Valor y esfuerzo
  4. Habilidad comunicacional
  5. Compromiso
  6. Visión de futuro, intuición y creatividad
  7. Gestión/Coordinación
  8. Influencia y respeto
  9. Inteligencia emocional
  10. Pensamiento estratégico
  11. Saberes y experiencia
  12. Confianza

Si reúnes mínimamente la mayoría de las que están aquí seguro tendrás ventajas al momento de liderar un equipo de trabajo, y no lo olvides, debes entrenarlas para superarte a diario.

¿Cuáles son las cualidades que debe tener un buen líder?

1. Pasión e inspiración

Si eres una persona que quiere liderar un equipo de trabajo, debes mostrar entusiasmo por tu empleo, pasión y predisposición y tener la habilidad de inspirar a los demás con esas mismas cualidades.

Más allá de las actividades inherentes al liderazgo, el grupo debe verte como una persona más del equipo, que pelea junto a ellos de la misma manera con la finalidad de obtener las metas que poseen en común. Por esta razón un buen líder jamás tiene el inconveniente de “arremangarse o ensuciarse las manos”.

2. Habilidad para delegar

Independientemente de cuánta cantidad de trabajo consideres que puedes realizar si eres jefe o por ti mismo, una de tus mayores fortalezas será la de delegar actividades. En el momento en el que un empleado comienza a tener el rol de coordinar o liderar, generalmente su mayor inconveniente sucede al momento de delegar tareas.

Hasta ese instante tenía la costumbre de realizar todo el trabajo que le encomendaban, y por ello su carencia será al momento de realizar un traspaso de aquello que ya no puede abarcar.

Un buen líder debe entrenar la capacidad de saber de qué manera delegar, tener en mente de forma clara cuáles son los límites de ese traspaso y en qué momento debe detenerse o echarse hacia atrás para no inmiscuirse en la tarea que se le otorgó a otro.


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Delegar no implica olvidarse de una actividad. Se pueden requerir ciertos reportes, para estar al tanto del estado de la tarea y si algo no está del todo bien, o hay inconvenientes poder intervenir solo para ayudar o acompañar.

La habilidad para delegar es una de las maneras de brindarle confianza a tu equipo de trabajo.

3. Valor y esfuerzo

Como líder tendrás más responsabilidades y también, junto a ellas, mayores riesgos. Deberás tomar determinaciones que pueden llevar al fracaso o al éxito de un trabajo conjunto y por supuesto que necesitarás tener el valor necesario para que los riesgos a tomar no te abruman y así poder continuar con alguna decisión.

También será necesario ser lo suficientemente maduro y coherente como asumir errores y no evadir gente ni problemas. Aceptar las consecuencias en cualquier circunstancia es fundamental para todo líder.

4. Habilidad comunicacional

Si posees un rol de liderazgo y no tienes buena habilidad de comunicación, todas las demás características tampoco te servirían. La información y tareas a realizar deben comunicarse de manera efectiva, transmitir confianza y entusiasmo.

De todas maneras, una buena comunicación no implica solo tener una buena conversación, sino tener la habilidad de escuchar a las personas que formen parte del equipo de trabajo para poder comprenderlos y acompañar correctamente el asesoramiento o ayuda que requieran.

Con una aptitud comunicativa eficaz como líder tendrás la posibilidad de anticiparte a los inconvenientes, no solo con el grupo, sino también con proveedores, clientes, etc.

5. Compromiso

El compromiso que demuestres será fundamental para tu rol de liderazgo. Con la compañía, con el grupo que coordines y con tus clientes o proveedores.

El compromiso implica estar siempre en los aciertos y errores, en las cosas negativas y positivas, y buscar continuamente la superación de tus procesos y herramientas en pos del bien corporativo y del ambiente laboral.

Si eres una persona comprometida y que transmite eso a su equipo, lograrás mejorar la motivación y la productividad.

6. Visión de futuro, intuición y creatividad

Las personas con fuerte liderazgo que son exitosas, tienen un percepción y visión de hacia dónde quisieran llegar y qué metas deben cumplir para lograrlo. Y es la visión lo que diferencia a un líder de un gerente o manager.

Un manager que se desempeña coordinando al equipo, pero no suma visión jamás podrá ser un líder.

La visión es poder ver lo que para los otros es invisible, y está íntimamente relacionada a las cualidades de intuición y creatividad. La intuición permite desbloquear situaciones que no avanzan o que estaban muy dificultosas, y la creatividad es un recurso fundamental para resolver inconvenientes. Las tres cualidades en conjunto te permitirán como líder desarrollarte y avanzar en tu recorrido sin cesar.

7. Gestión/Coordinación

La coordinación, el orden y la planificación deben ser una de las bases fundamentales de un buen liderazgo.

Necesitarás utilizar muy bien la estrategia para capitalizar las herramientas que posees a tu alcance y así, obtener las metas con el menor derroche posible.

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También poseen la habilidad para lograr que todos trabajen de manera organizada y orientada hacia las cuestiones esenciales del negocio.

La visión global con la que cuentan sobre los proyectos es muy ordenada y clara, y están al tanto de las tareas en las que invierte cada persona que integra su grupo de trabajo.

8. Influencia y respeto

Como líder no precisas utilizar la autoridad o la jerarquía sobre tu equipo de trabajo. Quien sabe liderar lo hace a través de la inspiración, usando su carisma, y sus valores. Procura que sus empleados y seguidores quieran serlo y no que “deban”.

La inspiración de respeto no provendrá de la dominación o intimidación de sus empleados, sino de conducirse con honestidad y respeto, y ser considerado para con todo su equipo y el entorno laboral. Si no infundes respeto tampoco te seguirán.

9. Inteligencia Emocional

Es un factor altamente valorado en cualquier trabajador, y es fundamental para un buen líder ya que te destacará al poder advertir las necesidades de tus empleados, comprender sus emociones y encauzarlas hacia lo que el proyecto y la corporación precisan.

 10. Pensamiento estratégico

Tener la vista puesta en el futuro y poder anticiparte para prever desafíos que se presenten en la organización es una marca de un buen líder.

Tu tarea será cumplimentar con los requerimientos actuales garantizando una buena situación o disposición en el futuro, incluyendo metas u objetivos reales para poder obtenerlos.

 11. Saberes y experiencia

Parecerá una obviedad, pero no deja de ser fundamental si eres líder o estás en carrera para serlo. Tienes que conocer tu campo de acción y los desafíos diarios a los que se enfrentan tú y tu equipo, como nadie.

La experiencia te brindará la práctica necesaria para poder progresar más allá de los obstáculos, sumar soluciones cuando sea necesario y ser la guía de tu grupo para que puedan lograrlas por sí mismos.

 12. Confianza

La confianza se muestra a partir de la actitud que tengas. La ética, el respeto y la integridad con la que te manejes te otorgarán coherencia, y te harán una persona confiable.

Confiar en cada persona de tu equipo, así como en ti mismo será fundamental para obtener un buen clima laboral que permita la productividad de cada uno.

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